La alfabetización informacional, ¿Pero esto que es?
LA ALFABETIZACION INFORMACIONAL, ¿Pero esto que es?
El concepto de Biblioteca Pública ha evolucionado extraordinariamente de un tiempo a esta parte. Ha pasado de ser un lugar de almacenamiento y préstamo de una colección de documentos, a una entidad que sirve (además) de intermediaria entre el usuario y la información, buscando satisfacer sus necesidades en este campo. De ahí que asuma funciones que hasta ahora no se contemplaban y que por tanto son desconocidas por el ciudadano medio en general, y por el propio usuario que utiliza sus servicios en particular. El objetivo de este artículo es dar a conocer alguno de estos servicios - muy actuales - que la biblioteca ofrece en cumplimiento de sus funciones informativas y educativas, hoy en día más necesarias que nunca.
En principio la información se encuentra a raudales (lo que se conoce como “infoxicación”) y es preciso digerir semejante cúmulo de datos e informaciones que se nos presenta en internet. Es en este campo donde la biblioteca pretende cobrar protagonismo y aportar su experiencia. Desde la perspectiva de la biblioteca como centro de recursos para la información nos encontramos con dos tipos de materiales: el libro tradicional en papel (que se remonta a la invención de la imprenta) y los documentos en línea(online) que encontramos en internet. Vamos a centrarnos en este segundo tipo para comprender el concepto de Alfabetización Informacional, que no es otra cosa que alfabetizar al usuario en el uso de la información ( a diferencia de lo que se hacía hasta ahora que era alfabetizar en la escritura). Hoy en día no es suficiente con saber leer y escribir sino que hay que saber cómo acceder a la información colgada en la red. En cualquier faceta de nuestra vida diaria vamos a necesitar en algún momento acudir a ella para satisfacer nuestras demandas informativas sobre cualquier tema relacionado con lo personal o con la vertiente profesional.
Hasta ahora la biblioteca dentro de sus funciones educativas desarrollaba tareas de formación de usuario en el conocimiento de la biblioteca y sus fondos bibliográficos, pero a día de hoy es obligado encaminar esta formación hacia la alfabetización informacional, puesto que aquí está la llave para acceder al conocimiento. La red de redes (internet) se usa con tres fines: ocio (obtener entretenimiento), trabajo (solucionar tareas relacionadas con el trabajo), y estudio e investigación (obtener las referencias y documentación necesarias para estas tareas). Por ello es importante conocer mejor el mundo digital, existe cierto desconocimiento sobre este tema que dificulta obtener los resultados esperados cuando se utiliza este servicio. Cuando nos movemos en el mundo de las nuevas tecnologías (Tecnología de la Comunicación y la Información) se habla de nativos e inmigrantes digitales, los primeros son las generaciones que han nacido cuando ya estaban instaladas estas tecnologías en la vida diaria, mientras que los segundos se han visto obligados a adaptarse a ellas cuando su educación y desarrollo ha sido analógico. Tanto unos como otros deben formarse en el conocimiento de estas nuevas tecnologías puesto que si bien los niños tienen mayor facilidad para aprender conocen este mundo de modo muy superficial (ejemplo busqueda de información utilizando sólo Google), respecto a los adultos mayores de cuarenta años su desconocimiento, por supuesto, es todavía mayor. Hay que trabajar con ambos grupos para que adquieran habilidades y competencias que mejoren su gestión de la información y la comunicación.
Y eso es la base de lo que llamamos Alfabetizacion y que entra dentro de las actividades de formación de usuario de la biblioteca viene realizando desde hace muchos años. Existen dos tipos de alfabetización: tecnológica que abarca el conocimiento de ordenadores (hadware) y la navegación (internet), frente a la informacional que se ocupa de los aspectos de gestion de la información ( necesidades de cada usuario, búsqueda de documentos, organización de los resultados, edición y presentación y por último comunicación a través de las nuevas tecnologías). Para poder llevar a cabo estas tareas existen una serie de herramientas sociales o 2.0 muy útiles y sencillas de utitilizar. En la alfabetización se muestran estas herramientas y se conocen para aplicarlas a las tareas propias de cada usuario. Algún ejemplo de herramientas sociales son: marcadores sociales (ifavoritos), almacenamiento imágenes y videos (youtube y picassa), escritorios(netvibes), almacenamiento archivos (google drive o dropbox), redes sociales (no sólo facebook)...y muchas más que no mencionamos puesto que excede del propósito de este artículo.
Las consecuencias que se derivan de aplicar esta formación en competencias informacionales y digitales son un mayor conocimiento, lo que a su vez deviene en un mayor desarrollo personal o profesional, y esto a su vez en una mayor competencia social, con lo que ello supone para un mejor desenvolvimiento en todos los ámbitos de la vida. La biblioteca de Andorra ofrece un servicio de alfabetización informacional que se divide en dos tipos, según a quién va dirigido: individual o autoaprendizaje (consulta del aula virtual en la página web de la biblioteca) y colectiva (dirigida sobretodo a los colegios en sesiones divididas por grupos y cursos). Contiene este servicio una serie de proyectos que van desde cómo utilizar el catálogo automático de la biblioteca hasta el conocimiento de las principales fuentes de información en internet, pasando por los libros electrónicos en la red o el taller de empleo.
Algunos ejemplos de lo que puede aprenderse son: para un aficionado a la escritura...publicar un libro en internet utilizando servicios gratuitos que se ofrecen (las herramientas 2.0 que hemos mencionado más arriba); para un estudiante..aprender a buscar un tema y desarrollarlo acudiendo a todo tipo de fuentes de información; para un profesional...publicar gratis su propia página web de la empresa y gestionarla con herramientas 2.0(Google Apps, Escritorio virtual netvibes, perfil en redes sociales); para un parado...aprender mediante un tutorial a elaborar su curriculum, saber buscar empleo utilizando las principales páginas y redes sociales, crear su carta de presentación y aprender a desenvolverse en una entrevista. Y por supuesto en este tipo de servicio también tiene un lugar importante el conocimiento de los libros en el nuevo soporte electrónico, así como la lectura y sus nuevos formatos.
De todo lo expuesto se deduce los siguiente: la biblioteca pretende apoyar a la educación formal en el aprendizaje de nuevas tecnologías al usuario en general, y a los niños y jóvenes en particular, para que mejoren sus conocimientos. En definitiva, la biblioteca está abierta para todo aquel ciudadano que desee mejorar su formación en el ámbito tecnológico e informacional.
El concepto de Biblioteca Pública ha evolucionado extraordinariamente de un tiempo a esta parte. Ha pasado de ser un lugar de almacenamiento y préstamo de una colección de documentos, a una entidad que sirve (además) de intermediaria entre el usuario y la información, buscando satisfacer sus necesidades en este campo. De ahí que asuma funciones que hasta ahora no se contemplaban y que por tanto son desconocidas por el ciudadano medio en general, y por el propio usuario que utiliza sus servicios en particular. El objetivo de este artículo es dar a conocer alguno de estos servicios - muy actuales - que la biblioteca ofrece en cumplimiento de sus funciones informativas y educativas, hoy en día más necesarias que nunca.
En principio la información se encuentra a raudales (lo que se conoce como “infoxicación”) y es preciso digerir semejante cúmulo de datos e informaciones que se nos presenta en internet. Es en este campo donde la biblioteca pretende cobrar protagonismo y aportar su experiencia. Desde la perspectiva de la biblioteca como centro de recursos para la información nos encontramos con dos tipos de materiales: el libro tradicional en papel (que se remonta a la invención de la imprenta) y los documentos en línea(online) que encontramos en internet. Vamos a centrarnos en este segundo tipo para comprender el concepto de Alfabetización Informacional, que no es otra cosa que alfabetizar al usuario en el uso de la información ( a diferencia de lo que se hacía hasta ahora que era alfabetizar en la escritura). Hoy en día no es suficiente con saber leer y escribir sino que hay que saber cómo acceder a la información colgada en la red. En cualquier faceta de nuestra vida diaria vamos a necesitar en algún momento acudir a ella para satisfacer nuestras demandas informativas sobre cualquier tema relacionado con lo personal o con la vertiente profesional.
Hasta ahora la biblioteca dentro de sus funciones educativas desarrollaba tareas de formación de usuario en el conocimiento de la biblioteca y sus fondos bibliográficos, pero a día de hoy es obligado encaminar esta formación hacia la alfabetización informacional, puesto que aquí está la llave para acceder al conocimiento. La red de redes (internet) se usa con tres fines: ocio (obtener entretenimiento), trabajo (solucionar tareas relacionadas con el trabajo), y estudio e investigación (obtener las referencias y documentación necesarias para estas tareas). Por ello es importante conocer mejor el mundo digital, existe cierto desconocimiento sobre este tema que dificulta obtener los resultados esperados cuando se utiliza este servicio. Cuando nos movemos en el mundo de las nuevas tecnologías (Tecnología de la Comunicación y la Información) se habla de nativos e inmigrantes digitales, los primeros son las generaciones que han nacido cuando ya estaban instaladas estas tecnologías en la vida diaria, mientras que los segundos se han visto obligados a adaptarse a ellas cuando su educación y desarrollo ha sido analógico. Tanto unos como otros deben formarse en el conocimiento de estas nuevas tecnologías puesto que si bien los niños tienen mayor facilidad para aprender conocen este mundo de modo muy superficial (ejemplo busqueda de información utilizando sólo Google), respecto a los adultos mayores de cuarenta años su desconocimiento, por supuesto, es todavía mayor. Hay que trabajar con ambos grupos para que adquieran habilidades y competencias que mejoren su gestión de la información y la comunicación.
Y eso es la base de lo que llamamos Alfabetizacion y que entra dentro de las actividades de formación de usuario de la biblioteca viene realizando desde hace muchos años. Existen dos tipos de alfabetización: tecnológica que abarca el conocimiento de ordenadores (hadware) y la navegación (internet), frente a la informacional que se ocupa de los aspectos de gestion de la información ( necesidades de cada usuario, búsqueda de documentos, organización de los resultados, edición y presentación y por último comunicación a través de las nuevas tecnologías). Para poder llevar a cabo estas tareas existen una serie de herramientas sociales o 2.0 muy útiles y sencillas de utitilizar. En la alfabetización se muestran estas herramientas y se conocen para aplicarlas a las tareas propias de cada usuario. Algún ejemplo de herramientas sociales son: marcadores sociales (ifavoritos), almacenamiento imágenes y videos (youtube y picassa), escritorios(netvibes), almacenamiento archivos (google drive o dropbox), redes sociales (no sólo facebook)...y muchas más que no mencionamos puesto que excede del propósito de este artículo.
Las consecuencias que se derivan de aplicar esta formación en competencias informacionales y digitales son un mayor conocimiento, lo que a su vez deviene en un mayor desarrollo personal o profesional, y esto a su vez en una mayor competencia social, con lo que ello supone para un mejor desenvolvimiento en todos los ámbitos de la vida. La biblioteca de Andorra ofrece un servicio de alfabetización informacional que se divide en dos tipos, según a quién va dirigido: individual o autoaprendizaje (consulta del aula virtual en la página web de la biblioteca) y colectiva (dirigida sobretodo a los colegios en sesiones divididas por grupos y cursos). Contiene este servicio una serie de proyectos que van desde cómo utilizar el catálogo automático de la biblioteca hasta el conocimiento de las principales fuentes de información en internet, pasando por los libros electrónicos en la red o el taller de empleo.
Algunos ejemplos de lo que puede aprenderse son: para un aficionado a la escritura...publicar un libro en internet utilizando servicios gratuitos que se ofrecen (las herramientas 2.0 que hemos mencionado más arriba); para un estudiante..aprender a buscar un tema y desarrollarlo acudiendo a todo tipo de fuentes de información; para un profesional...publicar gratis su propia página web de la empresa y gestionarla con herramientas 2.0(Google Apps, Escritorio virtual netvibes, perfil en redes sociales); para un parado...aprender mediante un tutorial a elaborar su curriculum, saber buscar empleo utilizando las principales páginas y redes sociales, crear su carta de presentación y aprender a desenvolverse en una entrevista. Y por supuesto en este tipo de servicio también tiene un lugar importante el conocimiento de los libros en el nuevo soporte electrónico, así como la lectura y sus nuevos formatos.
De todo lo expuesto se deduce los siguiente: la biblioteca pretende apoyar a la educación formal en el aprendizaje de nuevas tecnologías al usuario en general, y a los niños y jóvenes en particular, para que mejoren sus conocimientos. En definitiva, la biblioteca está abierta para todo aquel ciudadano que desee mejorar su formación en el ámbito tecnológico e informacional.
Jesús García
Biblioteca Púbica Andorra
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